No eches tu visión al caño

Sólo una breve reflexión.

¿Qué diferencia hay entre un propósito y un deseo?
Creo que hemos confundido dos situaciones, dos condiciones de existencia que hemos mezclado.

Mira, cuando ves a una chica o chico que te agrada mucho, puedes desear. Y de cada quién depende el vuelo de su fantasía deseosa. Desde el simple... ¡Qué bien que fuera mía esa persona! Hasta la admiración casi fanática por esa persona.
El deseo puede traducirse en: "certeza de que al obtener algo que no está en mis manos lograr, obtendría placer, pero, pues no depende de mí"
Lo más que podemos hacer ante tal fuerza es pedir, que en un gradiente intenso, es rezar implorando clemencia. Y si no pues ni modo, NO LO. MERECÍAS.

Tener un propósito es distinto. Un propósito es "acción determinada, con certeza de que está en tus manos lograr lo que quieres, más allá del placer o dolor que esto implique"

¿Ves la diferencia? El principio del placer y dolor se trasciende.

TIP: Existen muchas clases de barrera. Las barreras físicas, las barreras de energía, las barreras de espacio, las barreras de tiempo y las que están. Hechas de ideas. ¿Tienes ideas que te limiten? Por ejemplo ¿dejas de ir al gimnasio porque todos ahí se ven más delgados, o porque te han dicho que desistirás? La acción determinada ha previsto las barreras de toda clase y tiene un perseverante (no terca) manera de pasar a través de ellas.

Me gustaría comenzar un diálogo al respecto. Así que pronto verás un video sobre este mismo tema y otros. Suscríbete a este blog para mantener el coacheo colectivo. Ya sea por email o feed.

No eches tus visiones por el caño!!

Jesús Homero Facio
Coach
Mtro. Terapia Gestalt
Dr. Filosofía Gestalt